Los mejores platos con setas para este otoño

Boletus, níscalos, setas de cardo o trufa negra son algunas de las variedades más famosas de hongos. Todos ellos ofrecen mil y una formas de elaborar platos con setas y así optar por los productos de temporada. Una apuesta versátil y nutritiva para la carta de cualquier restaurante, ya que incluir los productos típicos de otoño supone aprovechar al máximo todos sus beneficios.
6 recetas de platos con setas para una carta muy otoñal
Las setas aportan fibra, tienen un elevado poder saciante, son ricas en vitaminas y minerales y apenas tienen calorías. Además, son muy sabrosas y permiten su incorporación en todo tipo de elaboraciones y con diferentes ingredientes. Estas son 6 ideas de platos que puedes incluir en la carta de tu restaurante para sacar el máximo provecho a la temporada de setas.
Crema de setas
Para una crema de setas, los ingredientes que se necesitan son setas surtidas, cebolla, leche evaporada, caldo de verduras y sal gruesa.
Se limpian bien las setas y se cortan en pequeños trozos. Paralelamente, se pica una cebolla y se cuece a fuego lento para pocharla. Luego, se añaden las setas a la sartén y se saltea todo durante unos 10 minutos. El resto de setas se echan en un cazo con el caldo de verduras y también se ponen a cocer durante 10 minutos. Se tritura la mezcla para hacerla puré y se añade la leche evaporada.
Setas empanadas
Se necesitan, al menos, 12 hongos, un par de huevos y pan rallado. El primer paso que habrá que dar será empanar. El procedimiento es el de toda la vida: en un plato el huevo batido, en otro el pan rallado y se irán rebozando las setas. Luego, se espolvorea un poco de sal y se echan a freír cuando el aceite esté hirviendo.
Cuando ya están todas fritas, se escurren en papel el aceite y se sirven. Se pueden acompañar de alguna salsa.
Croquetas de boletus
En este caso, se necesita leche entera, boletus, harina, mantequilla, sal, huevos, pan rallado y nuez moscada.
Se cortan las setas boletus en pequeños trozos y se saltean en la sartén con mantequilla. Luego, se añade la harina y se remueve todo bien. Poco a poco se va agregando la leche, se echa una pizca de sal y pimienta y se le da un toque con la nuez moscada.
Cuando ya se tiene la masa, se forman las croquetas. Posteriormente, se pasan las croquetas por el huevo que ya estará batido y el pan rallado. Terminar friendo en aceite de oliva hirviendo, escurrir y servir.
Lasaña de setas
Se necesitan setas variadas, beicon, cebolla, aceite de oliva, vino blanco, queso rallado, sal, leche entera, harina, mantequilla, pimienta negra molida, nuez moscada molida y 5 láminas especiales de pasta para lasaña.
El primer paso es calentar el aceite en la sartén y rehogar la cebolla picada y el beicon. Se agregan las setas y se sigue salteando varios minutos. Se echa el vino y se deja evaporar el alcohol. Paralelamente, se hace la bechamel.
El proceso continúa con el montaje de la lasaña, poniendo una lámina de base con la bechamel y otra con el preparado de setas y beicon, así sucesivamente en capas. Finalmente, se gratina con el queso en el horno.
Salteado de níscalos
Lo habitual es combinarlo con sepia, de ahí que se necesite una pieza de este molusco, 6 níscalos, aceite de oliva, cebolla, sal, perejil y tomillo.
Lo primero es caramelizar la cebolla, que debe cortarse en juliana y ponerla a fuego lento con el aceite, añadiendo un poco de sal. Mientras se hace, se limpia la sepia y se corta en tiras. Una vez que la cebolla ya no tenga agua, se añade el pescado. Luego se limpian los níscalos y se cortan en trozos pequeños, para añadir a la sepia y la cebolla y que se cocine todo durante 10 minutos.
Se agrega el vino blanco y el perejil y se sirve adornado con una rama de tomillo.
Risotto de boletus
Para elaborar este plato de origen italiano hay que contar con arroz (se recomienda que sea especial para risotto), setas, cebolla, caldo de carne, vino blanco, mantequilla, parmesano, sal y aceite de oliva.
Se lavan y cortan las setas y se pela y pica la cebolla, haciendo un sofrito de todo. Se añade mantequilla y se agregan las setas. Hay que dejarlo durante unos minutos para que se cocine bien y se echa el vino blanco.
Luego, se incorpora el arroz y se sofríe todo junto. Conforme se vea que el arroz lo necesita, se va añadiendo el caldo de carne, siempre removiendo. Finalmente, se añade sal al gusto, mantequilla y parmesano rallado.
Como ves, hay vida más allá de las setas con jamón o setas al ajillo. Alimentos con un gran valor nutricional y versátiles que suponen la mejor apuesta para los platos más otoñales de cualquier carta de restaurante.